Las producciones a continuación son puramente elegidas desde el gusto personal de cada uno de los que hacemos Sin Subtítulos, cosa que puede implicar que muchas veces no coincida con la mejor técnica o la historia más entretenida.
En este documental exclusivamente personal, Laura Plasencia, su directora, nos muestra la vida de su familia y cómo la perdida de un padre puede desmantelar toda la conexión familiar y llevar a un giro brusco de las relaciones, algo que sucede más veces de lo que se piensa. El título viene del epitafio en la lápida de Adrián, el padre fallecido, retomado de una cita bíblica de San Agustín.
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La historia se dispara 11 años después de la muerte de Adrián, cuando una carta del cementerio de Chacarita llega para avisar sobre la pronta exhumación de sus restos. Ahora, sus 7 hijos jóvenes deberán decidir qué hacer con algo que ya no es su padre, pero que pesa más aún en la conciencia de los hermanos.
Laura es la que toma la posta de la situación y trata de reunir a sus hermanos para que la decisión sea tomada en conjunto. Las opciones son llevarlo a un cementerio privado, llevar el cuerpo a un nicho o cremarlo y decidir luego qué hacer con las cenizas. Casi a modo catártico, Laura comienza a filmar este documental, que rompe constantemente la cuarta pared, para hablar con sus hermanos y su madre sobre su padre y la perspectiva que cada uno tuvo desde el momento en que su padre falleció.
A lo largo de los minutos se irán viendo diversos momentos tensos, de profundidad, de tristeza y llantos, y hasta reveladores, todo conjugado con imágenes de video de distintas vacaciones familiares en donde salta a la luz la centralidad de la figura del padre en el círculo familiar y de cómo, con su partida, el sentido de la familia perfecta se extingue.
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