Critica de “Bandido”, el ocaso de la fama


Un enorme Osvaldo Laport en la piel de un cantante con fuertes sentimientos que transmite en profundidad. Una gran apertura del BAFICI 2021. Ahora también disponible en Cine.ar

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Inaugurando el festival, se proyectó la película cordobesa Bandido de Luciano JuncoOsvaldo Laport se pone en la piel del cantante de cuarteto Roberto Benítez, demostrando su capacidad para interpelar al espectador con historias populares, en uno de sus mejores papeles.

El Bandido es un cantante de música popular transitando los últimos rounds de la vida. Pasado su momento de gloria, se encuentra desilusionado y con intenciones de dejar de hacer lo que mejor sabe hacer, cantar. Tras sufrir el robo de su auto, unos vecinos de la zona acuden en ayuda del cantante. Entre ellos está Rubén, un amigo de la infancia. Recordando viejos tiempos, poco a poco la chispa de la pasión musical se vuelve a encender.

La mayor virtud de la película es la elección del protagonista: Osvaldo Laport interpretando a un avejentado romántico cantor, con las arrugas que le surcan la cara, sin necesidades pero tampoco ambiciones ni deseos. El actor le da todo a su personaje: el trabajo corporal, la gestualidad y la voz le otorgan toda la sensibilidad a ese hombre entrañable.

Osvaldo Laport le da todo a su personaje: el trabajo corporal, la gestualidad y la voz le otorgan toda la sensibilidad a ese hombre entrañable.

El Bandido es un cantante de música popular transitando los últimos rounds de la vida. Pasado su momento de gloria, se encuentra desilusionado y con intenciones de dejar de hacer lo que mejor sabe hacer, cantar. Tras sufrir el robo de su auto, unos vecinos de la zona acuden en ayuda del cantante. Entre ellos está Rubén, un amigo de la infancia. Recordando viejos tiempos, poco a poco la chispa de la pasión musical se vuelve a encender.

La mayor virtud de la película es la elección del protagonista: Osvaldo Laport interpretando a un avejentado romántico cantor, con las arrugas que le surcan la cara, sin necesidades pero tampoco ambiciones ni deseos. El actor le da todo a su personaje: el trabajo corporal, la gestualidad y la voz le otorgan toda la sensibilidad a ese hombre entrañable.

La historia cuenta la crisis existencial del cantante Roberto que, como dije, tiene una vida próspera aunque sin motivaciones personales. Es interesante que, desde la primera escena, se ubica en el ámbito privado del famoso, de la personalidad pública. Se trata de la búsqueda de identidad del protagonista, aun siendo mayor, como una vuelta de tuerca para volver a sonreír.

Los primeros planos siguiendo al protagonista nos acerca a sus pesares, la melancolía y la postura de este hombre frente al devenir y el olvido. Si bien, de a ratos se incorporan temas y personajes que pueden desviar un poco del eje, la historia hace que el público se compenetre con lo que Roberto siente a cada instante.

Fábula del camino del héroe, de la redención y la reinvención del hombre que no se quiere dar por vencido, Bandido tiene un humor sencillo y noble que llega al corazón de todos.

PUNTAJE: 8/10

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