Además de “Tiger King”, una de mis máximas recomendaciones en Netflix para esta cuarentena es “Atypical”: una serie original de la plataforma con tres temporadas de diez episodios cada una, que además está confirmada para una cuarta temporada que sería el final de la serie. La serie fue creada por Robia Rashid (quien trabajó en “How I Met Your Mother”) y toma la esencia de una historia positiva para mostrar un tópico que casi nunca se ve en una serie juvenil: el autismo.
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“Atypical” es la historia de Sam Gardner (Keir Gilchrist), un joven de 18 años que padece el trastorno del espectro autista, por lo que sus interacciones con otras personas se le hacen difíciles de experimentar. En compañía de su familia y de su mejor amigo, Sam lidia con problemas de la juventud y del instituto a través de una forma de ser muy única, muy atípica. Desde buscar una novia, y pasando por la sexualidad y la universidad, el joven amante de los pingüinos intenta encontrarse a sí mismo en esta historia.
No es la serie perfecta: recae en uno que otro cliché y quizás pueda tropezar con estereotipos. Sin embargo, conforme pasa la serie, vemos que se trata de un show fresco y con un gran sentido del humor. Como producción en sí, es una gran introducción al tema del autismo; aunque también está sujeta a más investigación de fondo, la serie logra sentar las bases de una manera respetuosa y honesta, sin caer en la burla o en la tragedia excesiva. Todo esto se debe a una sólida interpretación de Keil Gilchrist en el papel de Sam, con quien simpatizas pero también te hace ser analítico.
También hay que destacar al resto del elenco: Bridgette Lundy-Paine como Casey, la hermana cuasi bully, Jennifer Jason Leigh como Elsa, la madre sobreprotectora y Michael Rappaport como Doug, el padre algo descuidado. A ellos se suma su mejor amigo y compañero de trabajo, el excéntrico Zahid (Nik Dodani). Todos ellos y varios más hacen un trabajo estupendo y cada uno es muy entrañable.
Esta producción oscila entre la comedia y el drama adolescente orgánico que ofrece un excelente retrato de los patrones de comportamiento en el trastorno del espectro autista, además de combinar una etapa de llegada a la adultez sumamente cálida que te hará sentir bien en su mayoría. Es una historia de aprendizaje. Así mismo, la serie se sostiene más con los personajes de Sam y de Casey y su novio, uno de los desarrollos más completos de la serie. La primera temporada plantea todos los conflictos de los personajes para que en sus temporadas siguientes ellos evolucionen, aprendan de sus errores y crezcan en su desarrollo narrativo. Cada quien tiene su trama, su propio tema, bastante sencillos (como el del autismo) pero bien desarrollados y completos. Todo eso es gracias a un excelente ritmo con el que no te aburrirás. Es una serie muy dinámica, bien dirigida y bien escrita, donde cada personaje importa y te hará sentir bien.
“Atypical” es una serie recomendable que todos podrán disfrutar. Como una introducción al tópico del autismo, es excelente. Su dinamismo, su corazón y sus personajes convierten a la serie en una de las mejores de Netflix. Olvídate de ver lo mismo de siempre pues esta serie hará de tu entretenimiento algo fuera de lo típico.
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